El Hořec Centre, ubicado en Horní Malá Úpa en los montes Krkonoše, marca una nueva etapa para uno de los edificios más emblemáticos del poblado. Originalmente construido en 1928 como hotel, el inmueble ha sido transformado por el estudio ADR en un centro comunitario que combina tradición arquitectónica, diseño contemporáneo y una oferta cultural activa durante todo el año.

El proyecto responde a una visión compartida entre ADR y el resort local SKiMU: revitalizar la identidad arquitectónica de la región mientras se preserva el carácter de este paisaje de montaña. Para ello, el equipo decidió mantener la estructura original del edificio e integrarla con nuevas extensiones en concreto que amplían su funcionalidad y garantizan un uso seguro incluso bajo condiciones climáticas extremas.

Durante la restauración se realizó un hallazgo determinante: los niveles superiores escondían una estructura tradicional de madera ensamblada en troncos, una técnica poco común en la zona. ADR decidió conservarla y exponerla como elemento protagonista, convirtiendo estas plantas en espacios expositivos que muestran la maestría constructiva original.

El nuevo programa incluye una renta de equipo deportivo, café, tienda, sala de cine, áreas de exhibición y departamentos en la planta alta. Esta reorganización espacial implicó abrir los interiores, antes divididos en pequeñas habitaciones, para dar paso a ambientes más amplios, flexibles y luminosos.

La fachada en madera de alerce sin tratar conecta el edificio con la estética vernácula de los Krkonoše. Con el paso del tiempo, el material se oscurecerá naturalmente, integrándose al paisaje tal como lo hacía la construcción histórica.

El Hořec Centre incorpora además una plaza pública exterior, fortaleciendo su papel como punto de encuentro para residentes y visitantes. Más que una renovación arquitectónica, el proyecto es una apuesta por la vida comunitaria y la preservación cultural de Malá Úpa.

Por Mia Garcia

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