PARAÍSO EN LA CIUDAD

A pesar de que la CDMX, una gran ciudad, alberga decenas de hoteles y miles de habitaciones, la propuesta hotelera acogedora, mejor ubicada y con detalles distintivos, está ganando popularidad. 

Antigua escuela, Colima 71 es ahora un hotel de lujo que cuida cada detalle y pretende capitalizar el interés de mexicanos y visitantes por las artes convirtiéndose en un lugar clave que potencia la oferta de la zona, así como un hogar lleno de estilo y comodidad para los nómadas digitales.

Este espacio, ofrece una arquitectura envuelta en arte y diseño para evocar una experiencia especial, rica en lujo, diseño y exclusividad.

El proyecto arquitectónico fue realizado por TAX / Alberto Kalach, quien ideó un plan práctico adaptado al entorno natural de la zona. 

De esta forma, no solo se centró en construir un hotel estéticamente agradable y aislado de su entorno, sino también una experiencia que priorizara la resonancia con el ambiente, el contexto social y los bienes culturales.

Para brindar a sus visitantes un espacio de tranquilidad, Colima 71 ofrece dos estudios y 14 habitaciones, cada una de 40 a 50 metros. Estas habitaciones han sido diseñadas con los más altos estándares de comodidad y privacidad. Con la intención de que los huéspedes se sientan como en casa, cada habitación cuenta con un hermoso comedor y una espléndida cocina completa. 

Además, estas áreas fueron diseñadas para ser más cómodas para los visitantes que vienen a experimentar la trascendencia de los sentidos a través del arte, la arquitectura y el diseño de interiores.

El hotel dispone de una zona de lectura con una gran variedad de libros disponibles para que los amantes de la lectura puedan relajarse y leer mientras disfrutan de una taza de café o te, a la vez que se dejan envolver por el aroma del palo santo, el cual ayuda a limpiar y purificar el ambiente, creando una profunda sensación de armonía.

 Los muebles cuidadosamente seleccionados, importados de Italia y Portugal, crean una atmósfera cómoda y relajada.

En un entorno rodeado de arte y naturaleza, The Courtyard fue creado para consentir a sus visitantes. En este espacio común, los huéspedes podrán contemplar la instalación artística del artista visual Sofa Taboas y una chimenea de piedra tallada a mano.

En este proyecto, todos los pasillos del hotel están repletos de arte. Ana Ongay y DZ Art Liaisons, por ejemplo, seleccionaron diversas piezas que integran perfectamente al diseño del lugar, el cual estuvo a cargo de Karla Celorio Interiorismo y Nomah Studio.

Así mismo, el artista Darío Escobar, desarrolló una larga y muy particular instalación hecha de caucho vulcanizado referente a la serpiente emplumada, así como fotografías del artista contemporáneo mexicano Iñaki Bonillas.

Colima 71, es más que un hotel boutique, es una experiencia que te hace olvidar el caos de la ciudad que se encuentra afuera y te envuelve en un ambiente completamente sereno y relajado, mientras eres testigo de la gran fusión y variedad de diseño y arte que existe en México.

Por Fernanda Gordillo

Fotos cortesía Colima 71