De la naturaleza al símbolo

En sus primeras manifestaciones, el arte mesoamericano presenta arte apegado a una idea que con el tiempo se transformó a ser más natural bajo una visión realista para después presentar la preponderancia de la idea y el símbolo en todo su esplendor.

Apreciar las relaciones formales y conformación del arte mesoamericano en su contexto simbológico, permite comprender una parte fundamental de su cosmología, así como sus metáforas.

Como toda cultura, la mesoamericana buscó responder a las necesidades de supervivencia y a las grandes preguntas, como el origen, el misterio de la vida, de la muerte; todo ello desembocó en la creación de ideas y formas artísticas que hoy reconocemos como deidades, creencias y religión. El arte mesoamericano surgió con formas esquemáticas, que enfatizan ciertos rasgos mientras se privilegia el mensaje más que la forma.

En dos momentos posteriores alcanzó un grado de realismo sorprendente tanto en escultura como en pintura. El primero es en la zona Olmeca y el segundo es en la zona maya. La primera se encuentra en el periodo preclásico y la segunda en el periodo clásico Mesoamericano.

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El estilo esquemático, es aquel en que se privilegia el mensaje sobre la representación naturalista. Florece primero, en la gran Teotihuacán, donde aún se puede percibir el alto grado de desarrollo en la codificación de las ideas. Esto explica las esculturas del templo de Quetzalcóatl, la serpiente emplumada intercalada con los mascarones de Tlaloc. Este estilo esquemático vuelve a aparecer en el periodo postclásico, a partir del año 900 en todo el territorio conocido como Mesoamérica, desde Honduras hasta Durango y Sinaloa.

Cuando se precia el arte de nuestros ancestros se debe tener en cuenta, a cual periodo pertenece, porque eso evidenciará lo que debe apreciarse: si se trata de un acercamiento a la figura humana o animal de corte natural, es posible que la pieza pertenezca al periodo que va del 600 d.c. al 900 d.c.

Antes y después de estos siglos, del 1200 ac al 600 d.c. y del 900 al 1500 dc. Lo importante es la idea, el símbolo y el concepto. El significado era privilegiado en términos de la representación. En ambas tendencias alude a situaciones de la vida, como son el nacimiento, el sustento, el poder, el sacrifico, la muerte y la trascendencia.

Por Yuriria Robles

Fotos Cortesía Archivo personal